jueves, 27 de agosto de 2009

Global Research: Hugo Chávez y los medios de comunicación privados

El 2 de agosto de 2009, Reporteros Sin Fronteras (RSF) publicó un comunicado denunciando el cierre de «treinta y cuatro medios audiovisuales sacrificados por capricho gubernamental» en Venezuela. La organización parisina «protesta con vigor contra el cierre masivo de medios audiovisuales privados» y pregunta: «¿Acaso todavía está prohibido emitir públicamente la menor crítica hacia el gobierno bolivariano? Este cierre masivo de medios de oposición, peligrosa para el porvenir de debate democrático, sólo obedece a la voluntad gubernamental de callar las voces discrepantes, y sólo agravará las divisiones en el seno de la sociedad venezolana» (1).

RSF se refiere a la decisión que tomó la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) el 1 de agosto de retirar la frecuencia a treinta y cuatro emisoras de radio y televisión. Según RSF, sólo el hecho de que estos medios se hayan mostrado críticos con el gobierno de Hugo Chávez motivaría la decisión. En una palabra, se trataría de un acto político para acallar la prensa de oposición. La gran mayoría de los medios occidentales ha transmitido esta versión (2).

Ahora bien, la realidad es otra que RSF y las multinacionales de la información han ocultado cuidadosamente con el objetivo de engañar a la opinión pública y presentar al gobierno más democrático de América Latina (Hugo Chávez se ha sometido a quince procesos electorales desde que accedió al poder en 1998 y ha salido victorioso de catorce en escrutinios celebrados por el conjunto de la comunidad internacional por su transparencia) como un régimen que atenta gravemente contra la libertad de expresión.

Hugo Chávez y los medios de comunicación privados, por Salim Lamrani

lunes, 20 de julio de 2009

¿En quién confiar en una comisión por la verdad?


Por Robert Parry (Informe especial)

Artículo original: Who to Trust on a Truth Commission?


Lee Hamilton fue uno de los famosos miembros de la fraudulenta "Comisión Investigadora del 11S". El periodista de investigación Robert Parry nos relata su historia.

En el texto aparecerá muy a menudo la palabra "task force" que se puede traducir como "grupo de trabajo" o "grupo especial de operaciones", este término no sólo se utiliza el campo militar. Posiblemente, la traducción de la entrada de la Wikipedia en inglés tenga su definición más precisa, esta sería: Una task force es una unidad o formación temporal establecida para trabajar en una única definida tarea o actividad.

Capítulo 1. Aún cuando una Comisión por la Verdad para investigar los crímenes de la Administración Bush tiene cierto atractivo – especialmente si no va a haber un firme fiscal especial presentando cargos criminales – todavía estaría el asunto de quién ocuparía el puesto de llegar a la verdad.

Esto se debe a que durante las tres últimas décadas, los medios de comunicación y políticos de la clase dirigente de Washington se han mostrado increíblemente ineptos en la realización de investigaciones serias que pudieran penetrar hasta en las más inverosímiles historias ocultas si el objetivo de la investigación tenía amigos influyentes en lugares importantes.
En cambio, las investigaciones sobre cuestiones difíciles se han resuelto normalmente por medio de respuestas políticamente convenientes, especialmente cuando la predilección demócrata por el bipartidismo se enfrentaba a la ira republicana cuando se trataba de hacer rendir cuentas a alguien como Ronald Reagan, George H.W Bush, Dick Cheney o George W. Bush.
El problema clave es que la dotación de personal de casi todas las “Reinas y Reyes Magos” de Washington han visto crecer su reputación en el invernadero de la corrupción intelectual que ha dominado la capital durante los últimos 30 años - y, por tanto, están irremediablemente comprometidos.
Tomemos, por ejemplo, las reflexiones del director de la CIA, Leon Panetta, al periodista neoyorkino Jane Mayer acerca de la posible comisión por la verdad, y lo que podría hacer de ésta un equipo aceptable.
"No soy bueno en comisiones", dijo Panetta a Meyer. "Por otra parte, pude ver que podría tener algo de sentido, francamente, nombrar una comisión de alto nivel, con alguien como Sandra Day O'Connor, Lee Hamilton – a la gente le gusta eso".
Sin embargo, es debido a gente como esa - la jubilada del Tribunal Supremo de Justicia, Sandra Day O'Connor, republicana, y al ex diputado Lee Hamilton, demócrata - que los Estados Unidos está en el lío en el que está en la actualidad.
Tanto O'Connor como Hamilton se han enfrentado a difíciles decisiones políticas en su carrera y optaron por lo que era entonces considerado como el camino seguro – lo cual podría haber sido para ellos, aunque los Estados Unidos y el mundo sufrieron gravemente sus faltas de valentía y de previsión.
Famosamente, O'Connor se saltó la lógica jurídica en diciembre de 2000 para justificar la anulación del juicio electoral del pueblo norteamericano a nivel nacional y negar a los votantes de Florida un recuento honesto de sus votos para conseguir el objetivo partidista de poner a George W. Bush en la Casa Blanca. [Para más detalles, véase nuestro libro “Neck Deep” o Consortiumnews.com’s “A Time Machine to Save America.”]

Capítulo 2. El encargado de los republicanos

Kean, Bush y Hamilton

Thomas Kean y Lee Hamilton, presidente y vice presidente de la Comisión investigadora del 11S, junto a George W. Bush

Mientras tanto, Hamilton ha sido el encargado por los republicanos cuando han querido un demócrata que no empujara demasiado duro para destruir un frágil encubrimiento. Es un maestro dirigiendo investigaciones “no en búsqueda de la verdad”, sino en búsqueda de una solución políticamente aceptable.
Mi primera relación con una investigación de Hamilton fue en agosto de 1986 cuando era presidente de la Cámara del Comité de Inteligencia y recayó sobre él investigar las denuncias de las que yo había informado a la Associated Press sobre el asesor de la Casa Blanca, Oliver North, proporcionando apoyo secreto a los rebeldes de la contra de Nicaragua.
Hamilton encabezó una delegación de miembros de la comisión (entre ellos el republicano Dick Cheney) en la Sala de Crisis de la Casa Blanca, donde a North y a su jefe John Poindexter se les preguntó acerca de las acusaciones. Sus enfáticas negaciones se aceptaron como ciertas, y Hamilton se unió a otros miembros del comité en su acuerdo de no llevar a cabo una investigación más profunda.
La decisión bipartita complació a mucha gente en Washington - aunque no a mí y a algunos otros que habían trabajado duro para exponer la red clandestina de North.
Gracias a Hamilton, North y su equipo casi escaparon ilesos, si no hubiera sido porque uno de sus últimos aviones de aprovisionamiento fue derribado en Nicaragua el 5 de octubre de 1986, y un superviviente, Eugene Hasenfus, señaló con el dedo a la Casa Blanca y en particular a la Oficina del vicepresidente Bush. Un mes más tarde, la parte de la venta de armas a Irán del escándalo Irán-Contras apareció en un diario libanés.
Pronto, los "sabios" jefes de Washington fueron juntados de nuevo para resolver con delicadeza este escándalo impropio de tráfico de armas a alto nivel, blanqueo de dinero, incumplimiento de la ley, de mentiras y de negociaciones indirectas con terroristas. Lee Hamilton fue nuevamente aprovechado para dirigir el lado de la Cámara en la investigación Irán-Contra y de nuevo buscó desesperadamente un consenso bipartito.
Aunque Hamilton recibió una buena calificación por sus elegantes conferencias sobre el estado de derecho a Oliver North, entre bastidores Hamilton se estaba asegurando de que la investigación “no subiera demasiado la escalera” e implicara al presidente Reagan y al vicepresidente Bush en los aspectos más sucios del escándalo.
Hamilton también desvió la investigación del modo en el que la administración Reagan toleró a los traficantes de droga en la “Operación Contra” y como los neoconservadores bajo Reagan habían llevado a cabo lo que equivale a una operación de propaganda nacional encubierta para controlar la "percepción" de la opinión pública americana acerca de los contras. [Para más detalles, véase “Lost History” de Robert Parry.]
Para conseguir una apariencia de bipartidismo, Hamilton suavizó el informe final, poniéndose blando especialmente con Reagan y Bush. También con desacertadas concesiones de inmunidad, Hamilton arruinó los posteriores procesamientos de North y de Pointdexter, permitiendo que los jueces de la derecha en el Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos en Washington citaran la inmunidad parlamentaria como la razón para desechar las condenas.
Irónicamente, sería un patricio republicano de 80 años - fiscal especial Lawrence Walsh - el que haría el mayor progreso al conseguir que se rindieran cuentas en cierto grado por el escándalo Irán-Contras al romper lo que él llamaría el "cortafuegos" de la Casa Blanca que Hamilton no había podido detectar.
Walsh acusó al Secretario de Defensa de Reagan, Caspar Weinberger por ocultar pruebas clave sobre la venta de armas a Irán. Walsh también reveló que el Secretario de Estado, George Shultz, que hiciera sus votos en la comisión de Hamilton con las palabras "la confianza es la moneda del reino", había continuado mintiendo ante el Congreso (aunque Shultz no fue acusado).

Capítulo 3. La apertura de la sorpresa de octubre (October surprise)

Los investigadores de Welsh llegaron también a la conclusión (no fehaciente), de que la venta de armas del Irán-Contra, que ocurrió en 1985-86, podía haber tenido un precedente en los anteriores envíos de armas en el caso llamado “La sopresa de octubre” en el que la campaña Reagan-Bush presuntamente actuó a espaldas del presidente Jimmy Carter in 1980 para sabotear sus negociaciones con Irán para que liberaran a 52 rehenes, retenidos allí por aquel tiempo.
Estas sospechas llevaron a los investigadores de Welsh a pasar por el polígrafo al ex agente de la CIA Donald Gregg, que trabajó como Consejero para la Seguridad Nacional del vicepresidente Bush en los años 80. En 1990, un examinador de polígrafo del FBI estimó que Gregg mintió cuando contestó “no” a la pregunta: ¿estuvo alguna vez envuelto en un plan para retrasar la liberación de los rehenes en Irán hasta después de las elecciones presidenciales de 1980? [Ver el Informe Final del Consejo Independiente para los asuntos del Irán-Contra, VOL.I, 501]
Sin embargo, cuando la Cámara de Representantes comenzó a hacer la investigación de las denuncias sobre “La sorpresa de octubre” en 1991, fue de nuevo Lee Hamilton, quien fue puesto al mando, y la nueva investigación siguió el patrón de la marca de Hamilton de buscar respuestas que no perjudicaran a los republicanos.
Hamilton dio incluso derecho de veto a los republicanos sobre el personal demócrata, cuando permitió al republicano Henry Hyde (R-Illinois), bloquear el nombramiento del jefe del consejo de la Cámara para Asuntos Internacionales, Spencer Oliver, como uno de sus investigadores, al parecer porque Oliver creía que las acusaciones de La sorpresa de octubre podían ser ciertas.
Bajo la dirección Hamilton-Hyde, la "investigación" se convirtió en un empeñado esfuerzo de refutar las alegaciones planteadas por funcionarios y agentes de inteligencia iraníes, israelíes, americanos y europeos. La desacreditación se centró principalmente en la creación de coartadas para cubrir el paradero de George H.W. Bush y el jefe de la campaña de Reagan, William Casey en fechas clave.
Aunque las coartadas resultaron ser erróneas o manifiestamente falsas, consiguieron prosperar en el juicio de casi un año. Cuando una falsa coartada sobre el paradero de Casey un fin de semana a finales de junio de 1980 se derrumbó ante una abrumadora evidencia de lo contrario, la “Task Force” de Hamilton concibió una coartada igualmente falsa. [Ver Consortiumnews.com "¿Dónde está Bill Casey?" o “Secrecy & Privilege”, de Robert Parry para más detalles.]

Capítulo 4. Evitando la verdad

El compromiso de Hamilton de evitar verdades dolorosas se demostró crucial para el encubrimiento de la sorpresa de octubre en diciembre de 1992, a medida que su task force estaba terminando su investigación con la fuerte determinación de no ver ninguna fechoría republicana.
Sin embargo, justo un mes después de que Bill Clinton derrotara a George H. W. Bush en la campaña presidencial, la presa que había retenido 12 años de secretos, finalmente cedió. La task force de repente se vio inundada por una avalancha de nuevas pruebas de culpabilidad republicana.
El asesor jurídico en jefe de la task force, Lawrence Barcella, que había estado a bordo de la desacreditación, estaba sorprendido por la reciente aparición de nuevas pruebas. Éste llegó a la conclusión de que no podían ser ignoradas y que justificaba la ampliación de la investigación, al menos, un par de meses.
Años más tarde, Barcella me dijo que recomendó una prórroga de tres meses para Hamilton, de Indiana, pero el demócrata rechazó la idea de tomarse el tiempo adicional para ver las nuevas pruebas. Hamilton le dijo a Barcella que concluyera la investigación con la conclusión anterior de inocencia republicana.
Por lo tanto, la task force de la Cámara de la October Surprise hizo oídos sordos y la vista gorda a las pruebas recientes. Sin embargo Barcella no estaba del todo cómodo. El 8 de diciembre de 1992, dio instrucciones a sus diputados de poner “lenguaje”, como “puerta secreta" en caso de que las revelaciones más tarde refutaran las conclusiones del informe.
“Este informe no refleja y no podría reflejar cada pista que fue investigada, cada llamada telefónica que se hizo, cada contacto que se estableció”, sugirió Barcella como “redacción-puerta secreta”. "Del mismo modo, la task force no resolvió todos y cada uno de los informes de" curiosidades "," coincidencias ", subacusaciones o interrogaciones que se han planteado a través de los años y que se han convertido en parte de la sorpresa de octubre".
Pero parte de la información que llegaría durante el último mes de la investigación trataría no sólo de “curiosidades”, sino de cuestiones fundamentales tras el misterio de por qué los rehenes americanos permanecieron cautivos durante las elecciones de 1980 y fueron inmediatamente liberados después de que Bush y Reagan juraran sus cargos el 20 de enero de 1981.
El 17 de diciembre de 1992, el ex presidente iraní Abolhassan Bani-Sadr envió a la task force una carta describiendo las batallas internas en el gobierno iraní sobre la intervención republicana en la crisis de los rehenes de 1980. Bani-Sadr amenazó con revelar el acuerdo secreto entre los agentes de la campaña Reagan-Bush y los radicales islámicos cercanos al Ayatolá Ruhollah Jomeini, si no lo paraban.
Bani Sadr dijo que se enteró del trato secreto republicano con iraníes radicales en julio de 1980 después de que Reza Passendideh, un sobrino del Ayatolá Jomeini, asistiera a una reunión con el financiero iraní Cyrus Hashemi y el abogado republicano Stanley Pottinger, el 2 de julio de 1980 en Madrid.
Aunque se esperaba que Passendideh volviera con una propuesta de la administración Carter, Sadr dijo que Passendideh en su lugar vino con una propuesta del bando de Reagan.
"Passendideh me dijo que si no aceptaba esta propuesta, ellos [los republicanos] harían la misma oferta a mis rivales [radicales iraníes]. Dijo además que ellos [los republicanos] tenían una enorme influencia en la CIA", escribió Bani-Sadr. "Por último, me dijo mi rechazo a su oferta se traduciría en mi eliminación".
Bani-Sadr dijo que resistió las amenazas y pidió una inmediata liberación de los rehenes americanos, pero estaba claro que el astuto Jomeini estaba jugando a ambos lados de la calle política de los EE.UU.
Este plan secreto republicano de bloquear la liberación de los rehenes después de las elecciones americanas siguió siendo un punto de tensión entre Bani-Sadr y Jomeini, según la carta de Bani-Sadr. Éste dijo que su “baza” era la amenaza de decirle al pueblo iraní del trato secreto que las fuerzas de Jomeini habían establecido con los republicanos.
"El 8 de septiembre de 1980, invité a la gente de Teherán a reunirse en la Plaza de los Mártires para poder decirles la verdad", escribía Bani-Sadr. "Jomeini insistía en que no debía hacerlo en ese momento. ... Dos días más tarde, de nuevo, decidí revelarlo todo. Ahmad Jomeini [el hijo del ayatolá] vino a verme y me dijo, el 'Imán [Jomeini] promete de verdad" reabrir las conversaciones con Carter, si Bani-Sadr cejaba y no lo hacía público.
Bani-Sadr, dijo que la controversia llevó Jomeini a transmitir una nueva propuesta sobre los rehenes al gobierno de los EE.UU. a través de su yerno, Sadegh Tabatabai. Aunque Tabatabai hizo entrega de un nuevo plan de paz a agentes de EE.UU. en Alemania occidental, la iniciativa se deshizo cuando el Irak de Saddam Hussein invadió Irán a mediados de septiembre de 1980.
Mientras tanto, los contactos a alto nivel entre los representantes republicanos y Jomeini al parecer continuaron, recurriendo a menudo a agentes de inteligencia israelíes y europeos como intermediarios. En su enemistad con Jomeini, la situación política de Bani-Sadr se deterioró y fue pronto forzado a huir al exilio.

Capítulo 5. Evidencias corroborativas

El detallado testimonio de Bani-Sadr encaja con las anteriores declaraciones de otros dos altos funcionarios iraníes, el ex ministro de Defensa Ahmad Madani y el que actuaba como Ministro de Asuntos Exteriores Sadegh Ghotbzadeh.
Madani había perdido frente a Bani-Sadr en la carrera presidencial de 1980, a pesar de la ayuda encubierta de la CIA canalizada a su campaña a través de Cyrus Hashemi. Madani también descubrió que Hashemi estaba traicionándolos con los republicanos.
En una entrevista conmigo para PBS Frontline a principios de 1990, Madani dijo que Hashemi mencionó el nombre del jefe de la campaña de Reagan, William Casey, en relación con estas negociaciones encubiertas sobre los rehenes americanos. Madani dijo que Hashemi le instó a reunirse con Casey, y que se ganó la reprimenda de Madani de "no estamos aquí para hacer política".
Ghotbzadeh hizo sus comentarios acerca de la injerencia republicana contemporáneamente a los hechos, relatando a la Agencia France Press el 6 de septiembre de 1980, que había información de que Reagan estaba "tratando de bloquear una solución" al punto muerto de la negociación por los rehenes. (Ghotbzadeh más tarde fue ejecutado por la línea dura iraní.)
A pesar de las afirmaciones de Bani-Sadr, de sus conocimientos de primera mano y de las declaraciones corroborativas de otros dos altos funcionarios iraníes, la Cámara de la task force desestimó la declaración de Bani-Sadr como "rumores" que carecían de valor probatorio.
Pronto, sin embargo, había más pruebas para explicar convenientemente. El 18 de diciembre de 1992, un día después de la carta de Bani-Sadr, David Andelman, el biógrafo del jefe de inteligencia francés Alexandre deMarenches, dio testimonio jurado para la task force sobre los contactos republicano-iraníes.
Andelman, ex corresponsal del New York Times y de CBS News, dijo que mientras estaba escribiendo las memorias de deMarenches, el espía conservador admitió haber organizado reuniones entre los republicanos y los iraníes acerca de la cuestión de los rehenes en el verano y otoño de 1980, con una reunión celebrada en octubre en París.
Andelman dijo que deMarenches ordenó que las reuniones secretas fueran omitidas de sus memorias, porque la historia podría dañar la reputación de sus amigos, William Casey y George H. W. Bush. En el momento en el que Andelman trabajaba en el libro, Bush era candidato a la reelección como Presidente de los Estados Unidos.
El testimonio de Andelman corroboraba antiguas afirmaciones de una diversidad de agentes de inteligencia internacionales sobre la participación de Casey y Bush en la reunión de París. Pero la task force no consideró seriamente este testimonio, también, paradójicamente calificándolo como "creíble", pero luego afirmando que era "insuficientemente probatorio".
El razonamiento de la task force fue de que Andelman no podía "descartar la posibilidad de que deMarenches le hubiera dicho que era consciente y que participó en la reuniones de Casey, ya que deMarenches, no podía arriesgarse a decirle a su biógrafo que no tenía conocimiento de esas acusaciones".

Capítulo 6. Bush a París

Además de los testimonios corroborativos de agentes de inteligencia, incluido el agente de la inteligencia israelí Ari Ben-Menashe, la task force también era consciente del conocimiento del presunto viaje de Bush a París por el reportero del Chicago Tribune, John Maclean.

Maclean, hijo del escritor Norman Maclean, quien escribió “A river runs through it” (El río de la vida), dijo que una bien situada fuente republicana le dijo a mediados de octubre de 1980 del viaje secreto de Bush a París para reunirse con iraníes sobre el asunto de los rehenes. Maclean transmitió esa información a David Henderson, funcionario del Servicio Exterior del Departamento de Estado. Henderson recordó la fecha como el 18 de octubre de 1980.

Por su parte, Maclean nunca escribió sobre la filtración de los viajes de Bush a París porque, me dijo más tarde, un portavoz de la campaña electoral Reagan-Bush lo negó posteriormente. Con el paso de los años, el recuerdo de la filtración de desvaneció para Henderson y Maclean, hasta que las denuncias sobre la sorpresa de octubre volvieron a emerger a la superficie a principios de 1990.

Henderson mencionó la reunión de 1991 en una carta a un senador de EE.UU. que se me reenvió a mí mientras estaba trabajando para PBS Frontline. Aunque no deseoso de formar parte de la historia de la sorpresa de octubre, Maclean confirmó que había recibido la fliltración republicana. También estaba de acuerdo con el recuerdo de Henderson de que la conversación se produjo el o en torno al 18 de octubre de 1980. Maclean, se negó a identificar su fuente.

La importancia de la conversación Maclean-Henderson era que era información encerrada en una especie de ámbar histórico, libre de posteriores afirmaciones de agentes de inteligencia, cuya credibilidad había sido cuestionada.

No se puede acusar a Maclean de urdir el argumento de los viajes de Bush a París por algún motivo ulterior, ya que no había hecho uso de ello en 1980, ni tampoco se ofreció a hacerlo una década más tarde. Sólo lo confirmó cuando se le fue pedido por Frontline y aún así no estaba con muchas ganas de hablar de ello.

Capítulo 7. Estado de negación

1º Como puede que este título no refleje claramente su significado, su explicación vendría a ser: un estado en el que una persona se niega a ver la realidad.


En diciembre de 1992, a pesar de la creciente evidencia de que los republicanos habían tenido contactos secretos con los radicales iraníes en 1980, la task force continuó bajo las órdenes de Hamilton de no reconsiderar sus conclusiones o de ampliar la investigación.

Mientras tanto, las pruebas incriminatorias seguían viniendo.

El 21 de diciembre de 1992, el ex-funcionario de la CIA Charles Cogan narró un comentario de principios de 1981 del ayudante del banquero David Rockefeller, Joseph Reed al entonces director de la CIA William Casey acerca de su éxito en el bloqueo de la sorpresa de octubre de Carter.

Reed había sido el elegido de Rockefeller para ayudar al Sha de Irán después de su expulsión en 1979, que llevó al régimen de Jomeini a solicitar la retirada de miles de millones de dólares de las cuentas del Sha en el Rockefeller Chase Manhattan Bank.


Pero la crisis de los rehenes en Irán favoreció al banco porque el gobierno de los EE.UU. - como represalia por el secuestro de rehenes - congeló las cuentas. Si la crisis se resolvía rápidamente y de repente el dinero se descongelaba, la viabilidad financiera del Chase Manhattan habría sido puesta en duda.

Después de que Reagan y de que Bush tomaran posesión de sus cargos - y de que las cuentas del Chase siguieran congeladas - Reed fue nombrado embajador en Marruecos, lo que le llevó a visitar a Casey en la sede de la CIA, mientras que Cogan permanecía en la puerta de la oficina de Casey.

"Joseph Reed dijo:"nosotros " y, a continuación un verbo [y] algo sobre la sorpresa de octubre de Carter", declaró Cogan en un "testimonio secreto jurado". "La implicación fue de que hicimos algo en relación con la sorpresa de octubre de Carter".

Los investigadores de la task force entendieron que la cita al completo habría sido, "Jodimos la sorpresa de octubre de Carter", una declaración que estaba en el centro de lo que se le había asignado a la task force a investigar. Pero ésta omitió los recuerdos de Cogan de su informe completo.

Capítulo 8. Sentencias selectivas

La práctica de las sentencias selectivas de la task force comenzó a irritar a algunos de los congresistas demócratas asignados a la investigación.
Aunque las denuncias sobre la sorpresa de octubre, supuestamente, eran un mito, la información elaborada por su personal se mantuvo bajo estricto secreto. A los congresistas sólo se les permitía revisar las pruebas en una habitación bajo custodia.

Las restricciones significaban que muchos miembros se veían obligados a confiar en el personal de la task force que había sido reunido en gran medida excluyendo a cualquiera que pensara que las denuncias podrían ser ciertas. Otros, tenían conflictos de intereses que se inclinaban hacia la conclusión desacreditadora formulada.

Por ejemplo, el diputado de Barcella, Michael Zeldin, era amigo íntimo de Steven Emerson, escritor con estrechos vínculos con el Likud de Israel - cuyos dirigentes supuestamente desempeñaron un papel clave en las operaciones de la sorpresa de octubre y que podían estar expuestos por haber ayudado a derrocar a un presidente de los Estados Unidos (Carter).

Emerson había escrito un artículo desacreditador para The New Republic sobre la sorpresa de octubre en base a una coartada de Casey que resultó ser falsa. Sin embargo, investigadores de la Cámara me contaron que Emerson visitaba con frecuencia las oficinas de la task force y que Zeldin asesoró a otros en cómo interpretar las pruebas.

El 3 de enero de 1993, el Congresista Mervyn Dymally, demócrata de California y miembro de la task force que se jubilaba del Congreso, presentó una objeción al inminente informe de ésta, en el que se quejaba de la manipulación selectiva de las evidencias para eliminar la campaña Reagan-Bush.

Al examinar el informe, el asistente personal de Dymally, Marwan Burgan, había detectado algunas de las absurdas coartadas del informe, incluyendo la afirmación de que porque alguien escribió el número de teléfono de la casa de Casey un día, demostraba que éste estaba en casa, o que debido a que un avión volaba directamente desde San Francisco a Londres en otra fecha importante, que Casey debía estar a bordo.

Fuentes que vieron la objeción de Dymally dijeron que argumentaba que "sólo porque los teléfonos suenen y los aviones vuelen no significa que alguien esté allí para contestar o en el avión." Pero sus razonables observaciones fueron confrontadas ferozmente por Barcella, que reclutó al presidente de la task force, Lee Hamilton, para presionar a Dymally para que retirara la objeción.

Dymally me dijo que el día que presentó su objeción, recibió una llamada de Hamilton advirtiéndole de que si no era retirada, "voy a tener que ponerme duro contigo”.

Al día siguiente, Hamilton, que iba a convertirse en presidente de la Comisión de la Cámara de Asuntos Internacionales, despidió al personal de la subcomisión de África, que Dymally había dirigido. Los despidos fueron tratados como de rutina, y Hamilton me dijo: " las dos cosas vinieron al mismo tiempo, pero no estaban conectadas en mi mente."

Hamilton dijo que su advertencia a Dymally se referirió a una dura respuesta con la que habría amenazado a éste si su objeción hubiera seguido en pie. Sin embargo, con la esperanza de salvar los puestos de trabajo de su personal, Dymally aceptó retirarla.

Capítulo 9. La complicación rusa

De modo que el informe de la task force fue enviado a las impresoras con la conclusión de que "no había pruebas creíbles" de que los republicanos trataran a dos bandas con Irán sobre los 52 rehenes americanos en 1980.

El informe estaba programado que se publicara el 13 de enero de 1993, justo una semana antes de que la presidencia de George H. W. Bush llegara oficialmente a su fin. Pero todavía quedaba una sorpresa más para la task force.

El 11 de enero de 1993, Hamilton recibió la respuesta a una solicitud de información que había enviado al gobierno ruso el 21 de octubre de 1992, solicitando cualquier información que Moscú pudiera tener acerca del caso “sorpresa de octubre”.

La respuesta rusa vino de Sergey V. Stepashin, presidente de la Comisión del Soviet Supremo para la Defensa y Asuntos de Seguridad, un puesto equivalente al de presidente del Comité de Inteligencia del Senado.

En lo que podría haber sido un acto sin precedentes de cooperación entre los dos viejos enemigos, Stepashin presentó un resumen de lo que los documentos de la inteligencia rusa mostraban sobre la sorpresa de octubre y otros tratos secretos de los EE.UU. con Irán.

En la década de 1980, después de todo, la KGB soviética no estaba sin sus fuentes de información en un tema tan importante para Moscú como los acontecimientos en el vecino Irán. La KGB había penetrado o mantenido estrechas relaciones con muchos de los servicios de inteligencia vinculados a las denuncias del caso, incluidos los de Francia, España, Alemania, Irán e Israel.

La historia ha demostrado, también, que la KGB tenía espías dentro de la CIA y otras agencias de inteligencia de los EE.UU. Por lo tanto, la inteligencia soviética ciertamente estaba en condiciones de saber mucho acerca de lo que había o no había ocurrido en 1980.

La contestación del Soviet Supremo fue entregada a la Embajada de los EE.UU. en Moscú por Nikolay Kuznetsov, secretario de la Subcomisión sobre la Seguridad del Estado. Kuznetsov pidió disculpas por la "larga preparación de la contestación." Fue traducida rápidamente por la embajada de los EE.UU. y se le remitió a Hamilton.

Para horror de la task force, las seis páginas del informe ruso, establecían como hecho, que Casey, Bush, funcionarios de la CIA y otros republicanos se habían reunido en secreto con agentes iraníes en Europa durante la campaña presidencial de 1980.

Los rusos describieron las negociaciones por los rehenes de ese año como una competición entre la Casa Blanca de Carter y la campaña Reagan-Bush para pujar por encima de la otra para ganar la cooperación del gobierno de Irán en relación con la crisis de los rehenes.

Capítulo 10. Contradiciendo a Hamilton

Los rusos afirmaron que el equipo de Reagan-Bush, de hecho, había interrumpido las negociaciones de Carter por los rehenes, exactamente lo contrario de la conclusión a la que Hamilton había llegado.

Como fue descrito por los rusos, la administración Carter ofreció a los iraníes suministros de armas y el descongelamiento de activos para que liberaran a los rehenes antes de las elecciones. Los iraníes "discutían una posible normalización “paso a paso” de las relaciones americano-iraníes [y] la provisión de apoyo al presidente Carter en la campaña electoral a través de la liberación de los rehenes", señalaba el informe.

Pero los republicanos estaban haciendo sus propias ofertas a los iraníes, señalaba el informe ruso. William Casey, en 1980, se reunió en tres ocasiones con representantes de la dirección iraní. "Las reuniones tuvieron lugar en Madrid y París."

En la reunión de París en octubre de 1980, "R. Gates, en ese momento miembro del Consejo Nacional de Seguridad de la administración de Jimmy Carter y el ex director de la CIA George Bush, también participaron", decía el informe ruso. "En Madrid y París, los representantes de Ronald Reagan y los líderes iraníes discutieron la cuestión de, posiblemente, retrasar la liberación de los 52 rehenes del personal de la Embajada de los EE.UU. en Teherán." [Gates es ahora secretario de Defensa.]

Tanto los republicanos de Reagan-Bush y los demócratas de Carter "partieron de la tesis de que el Imán Jomeini, después de haber anunciado una política de" ni Occidente ni Oriente, y maldiciendo al "diablo americano", al imperialismo y al sionismo, se veía obligado a adquirir de América armas, repuestos y suministros militares por todos los medios posibles ", señalaba el informe ruso. Los republicanos ganaron la guerra de ofertas.

"Después de la victoria de R. Reagan en las elecciones, a principios de 1981, se llegó a un pacto secreto en Londres con el acuerdo de que Irán liberaría a los rehenes americanos, y los EE.UU. continuarían con el suministro de armas, repuestos y suministros militares para el ejército iraní, "continuaba el informe ruso.

Las entregas se llevaron a cabo por Israel, a menudo a través de traficantes de armas privados. Las piezas de repuesto para los cazas F-14 y otros equipos militares iban a Irán desde Israel en marzo y abril de 1981 y el conducto de envío de armas continuó fluyendo a mediados de la década de 1980, según el informe.

"A través del conducto israelí, Irán, en 1983 compró misiles tierra-tierra" de la clase “Lance" y artillería por un valor total de 135 millones de dólares," señalaba el informe ruso. "En julio de 1983, un grupo de especialistas de la empresa Lockheed, fue a Irán con pasaportes ingleses para reparar los sistemas de navegación y otros componentes electrónicos de los aviones fabricados en América."

En 1985, el grifo de las armas se abrió más, en los envíos del Irán-Contra.

El práctico informe ruso era impresionante. Asimismo, coincidía con otra información que la task force tenía. Por ejemplo, ésta había descubierto que los israelíes habían enviado repuestos militares americanos a Irán en 1981, con el secreto consentimiento de altos funcionarios de la administración Reagan-Bush.

Capítulo 11. El dilema de Hamilton

Hamilton se enfrentaba al dilema sobre qué hacer con el explosivo informe ruso, el cual – si era preciso - el informe de la task force, que estaba entonces en las impresoras, no valía ni lo que el papel en el que estaba siendo impreso.

Reputaciones, entre ellas la de Hamilton, podrían haber sido gravemente dañadas. Durante sus días como presidente de la Cámara del Comité de Inteligencia de mediados de la década de los 80, Hamilton había sido objeto de críticas por desechar tempranas pruebas acerca de las secretas operaciones de aprovisionamiento a la Contra por parte de Oliver North y por haber sido cogido desprevenido por los envíos militares encubiertos a Irán en 1985-86.

De haber tenido que renunciar a su propio informe de la sorpresa de octubre, Hamilton podría haber quedado pareciendo “el bobalicón” favorito de los republicanos. Tal vez no habría construido una brillante carrera post-congreso como bien considerado hombre de estado invitado a formar parte en importantes equipos como la 9/11 Commission, y más tarde en una task force con el ex Secretario de Estado James Baker para recomendar la futura estrategia en la guerra de Irak.

De modo que, en enero de 1993, Hamilton decidió enterrar el informe ruso.

"Tuvimos el material de los rusos pocos días antes de que el informe de la task force estuviera preparado para su publicación", Barcella me contó en una entrevista en 2004. "No íbamos a examinarlo, ya se tratara de nueva información, desinformación o lo que fuera."

Cuando le pregunté por qué él y Hamilton no publicaron el informe ruso, junto con el de la task force, Barcella respondió que el informe ruso fue clasificado, lo que impedía su divulgación al público. Hamilton se encontraba en una fuerte posición para que lo desclasificaran, pero decidió no hacerlo.

Así que el extraordinario informe ruso simplemente fue puesto en cajas y archivado con el resto de información no publicada que la task force había reunido. Barcella señaló que imaginaba que el material acabaría en algún gran almacén, "como en la película" En busca del arca perdida "

En realidad, el informe ruso encontró un lugar de descanso aún menos elegante. A finales de 1994, descubrí los documentos, incluido el informe ruso, en cajas que habían sido apiladas en un antiguo servicio de señoras que se utilizaba para el almacenamiento en una oscura oficina de los garajes del edificio de oficinas de la Rayburn House. [Para examinar los documentos clave del "Ladies Room", haz clic aquí.]

Si bien lamentable en términos de penetrar las mentiras oficiales en búsqueda de la verdad, Hamilton mejoró su actuación como investigador del Congreso con el estimado status de hombre sabio de Washington. Fue una elección natural para la 9/11 Commission y el Grupo de Estudio de Irak, alguien que haría todo lo posible para evitar irritar a los espinosos republicanos.

El Director de la CIA Leon Panetta, ahora mira hacia la respetada figura de Lee Hamilton, como el tipo de persona que podría ser de confianza para encabezar una comisión por la verdad sobre los crímenes de la administración de George W. Bush.

De este modo, sin darse cuenta Panetta confirma por qué tantos defensores de la petición de responsabilidades están a favor de un fiscal especial independiente - y por qué no confían en los internos de Washington para que investiguen sus propios actos.

Robert Parry dio la primicia de muchas de las historias del Irán-Contra en la década de los 80 para la Associated Press y Newsweek. Su último libro, Neck Deep: la desastrosa presidencia de George W. Bush, fue escrito con dos de sus hijos, Sam y Nat, y se pueden pedir en neckdeepbook.com. Sus dos libros anteriores, Secreto y Privilegio: el auge de la dinastía Bush desde el Watergate a Irak y La Historia perdida: Contras, Cocaína, la Prensa y el "Proyecto Verdad" también están disponibles allí. O ir a Amazon.com.

Para hacer una donación para que podamos continuar la presentación de informes y publicación de historias como la que usted acaba de leer, haga clic aquí.

Espero que hayas encontrado útil la traducción de este importante artículo de Robert Parry.

Si encuentras fallos o errores en la traducción, puedes enviarme tu sugerencia. Gracias

lunes, 22 de diciembre de 2008

Atentado de Lockerbie-20º Aniversario

¿Qué sabemos realmente del atentado?
traducido por martin@11-septiembre-2001.biz


Los restos del avión quedaron esparcidos en kms

El artículo original se titula "1988: Pan Am Flight 103 Bombing over Lockerbie, Scotland" By Amy Zalman, Ph.D

Lo que sucedió

El 21 de diciembre de 1988, el vuelo 103 de la Pan Am partía de Londres del Aeropuerto Internacional de Heathrow al aeropuerto internacional Kennedy de Nueva York, el avión explotó en su ruta sobre Lockerbie, Escocia. El vuelo se había originado en Frankfurt, Alemania, que es donde los explosivos se empaquetaron en el equipaje de mano, se colocaron en el avión después de que hubieran sido transportados a Frankfurt en un vuelo procedente de Malta. La explosión mató a 259 personas entre pasajeros y tripulación, así como a 11 residentes de Lockerbie.

Las investigaciones determinaron que Semtex, un explosivo plástico, fue el causante de que la nave volara en pedazos. Los explosivos fueron conectados a un dispositivo que medía la presión barométrica conectada a un temporizador. Estos fueron colocados dentro de una radio portátil o reproductor de casetes y empaquetados en una maleta. Nunca se ha determinado la forma en que el equipaje llegó al avión. La explosión se desencadenó cuando la presión barométrica en el interior del equipaje cayó debajo de cierto nivel durante el primer tramo del vuelo de Pan Am, que comenzó en Frankfurt.

Quién fue el responsable y por qué

Un cierto número de diferentes historias acerca de por qué ocurrieron los atentados de Lockerbie y quién estaba detrás de ellos se han considerado. Aunque el juicio concluyó con la condena de uno de los dos sospechosos libios en 2001, la cuestión de lo que ocurrió sigue siendo discutida. En todas las explicaciones, sin embargo, el ataque terrorista se entiende como un acontecimiento de entre una serie de respuestas violentas entre grupos terroristas tanto de respaldo gubernamental como independiente y los Estados Unidos en la década de los 80.

La explicación iraní

En la explicación que sitúa a Irán detrás del atentado, se entiende que Irán responde al derribo de un avión de pasajeros iraní por un portaaviones americano, el USS Vincennes, en 1986. El ataque mató a todas las personas que iban en el vuelo, 290. Los EE.UU. afirmaron que el avión iraní fue derribado por error. También se ha postulado que Irán pagó al Frente Palestino para la Liberación de Palestina para llevar a cabo el ataque.

La explicación libia

La explicación libia del atentado de Lockerbie a menudo se ha considerado como uno de una serie de ataques de respuesta entre Estados Unidos y Libia, o de agentes libios que se iniciaron sus ataques casi simultáneamente en Roma y el aeropuerto de Viena el 27 de diciembre de 1985, atribuidos al grupo Abu Nidal. Los EE.UU. supuestamente respondieron con el hundimiento de dos barcos libios, lo que condujo al atentado en un club nocturno de Berlín que mató a militares americanos. En respuesta, los Estados Unidos bombardearon la capital libia Trípoli y el puerto de Bengasi en 1986.

La acusación de los libios, y la aplicación de sanciones contra Libia

A finales de 1991, las autoridades británicas acusaron a dos libios que presuntamente trabajaban para los servicios de inteligencia de Libia, Abd Al Baset Ali Mohmed Al Megrahi y Al Amin Khalifa Fhimah, por asesinato, conspiración para asesinar y por la violación de la ley de seguridad de la aviación británica de 1982.

Posteriormente, Libia se negó a entregar a los dos hombres para el juicio, a pesar de las amenazas de sanciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que fueron impuestas en 1992. La Resolución del Consejo de Seguridad 748 (1992) impuso el embargo de armas y aéreo y con la Resolución 883 (1993) se congelaron los fondos de Libia y se prohibió la venta de equipos relacionados con su industria petrolera.

Los Estados Unidos por separado impusieron nuevas sanciones contra Libia, en parte para presionar por la entrega de los dos presuntos terroristas del atentado de la Pan Am para su enjuiciamiento. (En el momento de los atentados, sanciones de EE.UU. contra Libia, la congelación de los activos libios y la prohibición del comercio de EE.UU. con el país, ya llevaban teniendo lugar desde hacía dos años, 1986). Las sanciones existentes se complementaron en 1992, cuando EE.UU. prohíbió las exportaciones militares, así como de otro tipo a Libia, cortando el tráfico aéreo comercial con el país y reduciendo su representación diplomática. Las sanciones fueron reiteradas periódicamente o impuestas durante la década de los 90.

En 1999, la Unión Europea levantó las sanciones de la UE que se habían impuesto contra Libia en 1992.

El 3 de mayo de 2000, el juicio de los sospechosos se inició en Holanda, pero bajo la ley escocesa. Ambos alegaron su inocencia. A finales de enero de 2001, Al Megrahi fue declarado culpable, y Fhimah fue encontrado no culpable. El veredicto del juicio llevó de inmediato a británicos y europeos presionar para levantar las sanciones de las Naciones Unidas.

Una posterior apelación por parte de Al Megrahi fue rápidamente rechazada, pero se plantearon dudas acerca de la credibilidad de las pruebas en su contra. En particular, los abogados defensores presentaron pruebas de que había habido una brecha en la zona de carga de equipajes en el aeropuerto de Heathrow el día de los atentados. Esto sugería la posibilidad de otra serie de eventos no tratados en el juicio, de que la bomba había sido introducida en el equipaje transportado desde Malta.

En 2003, Libia aceptó la responsabilidad de los ataques y aceptó pagar a las familias de las víctimas una indemnización. Esto condujo a americanos y europeos a presionar para levantar las sanciones contra Libia. Las principales empresas petroleras de América que habían tenido anteriormente concesiones en Libia también ejercieron presión para que se levantaran las sanciones.

¿Qué hizo el atentado notorio?:

* Para los Estados Unidos, el atentado fue significativo, ya que mataron a 189 civiles, más civiles norteamericanos que en cualquier otro atentado hasta ese momento.
* El uso de explosivos plásticos fue una innovación en las tácticas terroristas que eludía los detectores de metales, y dio lugar a una serie de nuevos procedimientos para hacer de los viajes aéreos más pruebas para los terroristas.

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Testigo clave de Lockerbie admite perjurio
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miércoles, 3 de diciembre de 2008

¿Tendríamos la misma opinión de lo que ocurrió el 11S si hubiéramos sabido qué..?

  1. el 10 de septiembre del 2001 Donald Rumsfeld anunció que el pentágono no podía justificar la falta de más de 2.000.000.000.000 de dólares en sus cuentas (missing trillions), y no me he confundido, son ni más ni menos que 12 ceros.
  2. en cualquier país el escándalo habría sido de proporciones mayores y que en EE.UU. no hubo tal debido a los ataques del día siguiente.
  3. hubo movimientos bursátiles de gran importancia con relación a las 2 compañías aéreas perjudicadas días previos a los ataques y que gente que no ha sido identificada ha ganado una fortuna.
  4. el WTC pasó de manos públicas a privadas a mediados del año 2001.
  5. los arrendatarios fueron Silverstein Properties y Westfield América. ¿Larry Silverstein?
  6. se destinó más dinero para investigar el escándalo Lewinsky que para lo acontecido el 11S.
  7. el gobierno tardó 2 años en formar una comisión para investigar lo ocurrido y lo hizo debido a la presión popular.
  8. el ampliamente conocido como criminal de guerra y relacionado con operaciones encubiertas Henry Kissinger fue encargado por Bush para liderar dicha comisión y dimitió al de poco tiempo.
  9. los que dicen fueron los terroristas se entrenaron tomando lecciones de pilotaje de avionetas.
  10. Ruddy Dekkers, el que era dueño de una de las escuelas de aviación no era ciudadano americano como afirmaba ser y que fue visto con Mohamed Atta varias veces antes del 11S.
  11. Mohamed Atta recibió dinero de los servicios secretos pakistaníes (ISI).
  12. según el FBI el pasaporte de Satam Al Suaqami fue encontrado entre los escombros del WTC.
  13. los nombres de los 19 terroristas islámicos no constaban en ninguna de las compañías aéreas y que el FBI las consiguió no se sabe como.
  14. desde la crisis de los misiles de Cuba (1961) los pilotos estaban autorizados a llevar armas de fuego en la cabina y que esta ley se revocó 2 meses antes de los ataques.
  15. la familia Bush estaba en tratos con los Bin Laden (Carlyle Group).
  16. Cheney fue presidente de la Halliburton (intimamente relacionada con instalaciones de gas y combustible).
  17. la Arbusto Co. que pertenecía a los Bush es una empresa petrolífera.
  18. Condolezza Rice fue miembro de la junta directiva de CHEVRON.
  19. miembros del gobierno americano como los citados anteriormente tienen alguna relación con compañías petrolíferas o militares.
  20. Al-Qaida fue una creación del gobierno de Carter cuando estaba asesorado por el neocon Zbigniew Brzezinski y su objetivo era dar cobertura a los Mujahidin en su lucha contra los soviéticos.
  21. Zbigniew Brzezinski años antes había dicho que EE.UU. necesitaba un nuevo Pearl Harbor para desarrollar su proyecto de dominio mundial y consolidarse como la única superpotencia.
  22. Osama Bin Laden no está en la lista de las personas más buscadas del FBI.
  23. el mayor experto en Osama Bin Laden dice que la mayoría de los vídeos que ha hecho públicos el gobierno americano son falsos.
  24. desde que EE.UU. está en Afganistán la producción de opio ha aumentado.
  25. los derechos civiles en los EE.UU. están bajo minímos desde que el gobierno Bush ha aprobado ciertas restrictiva leyes. (Patriot Act)
  26. 15 de los 19 terroristas eran saudíes y que EE.UU. no atacó Arabia Saudí y que en su lugar atacó Afganistán y posteriormente invadió Irak.
  27. miembros de la familia Bin Laden y otros saudíes importantes fueron escoltados por el FBI y llevados a los aeropuertos desde donde abandonaron los EE.UU. en aviones privados cuando estos tenían todavía prohibido volar en América.
  28. Saddam Hussein no tenía ninguna relación con Al-Qaida y que no era una amenaza para la seguridad de los EE.UU.
  29. los propios americanos y otros países europeos vendieron el gas con el que luego gaseó a los kurdos.
  30. varios de los terroristas que según las autoridades americanas murieron en los atentados fueron entrevistados meses depués por cadenas como la BBC.
  31. algunos de los terroristas volaron por más de media hora sin que fueran interceptados cuando los protocolos indican que aviones en circunstancias anómalas son interceptados en menos de 10 minutos.
  32. existen protocolos que se siguen habitualmente que exigen el envío de aviones de caza cuando un avión comercial o de pasajeros se desvía de su ruta o pierde el contacto con la torre de control.
  33. la maniobra realizada por Hani Hanjour para impactar el Boeing 757 contra el Pentágono era increíble y que probablemente no la hubiera podido llevar a cabo ni un piloto experimentado.
  34. el gobierno solamente ha publicado 5 fotogramas en los que no se distingue nada de lo que supuestamente es el Boeing que impactó en el Pentágono.
  35. el FBI requisó 85 grabaciones de los edificios circundantes al Pentágono según la declaración de la agente especial del FBI Jacqueline Maguire.
  36. se sabe que Cheney estuvo en el Pentágono y que fue avisado varios minutos antes del impacto de los aviones.
  37. Bush dijo haber visto el impacto del primer avión cuando esto era imposible puesto que las imágenes no se hicieron públicas hasta el día siguiente.
  38. que al menos un familiar de Bush (Marvin Bush, hermano) tenía relación con la compañía de seguridad del WTC en aquella época.
  39. se realizaron varios simulacros de evacuación en el WTC previos al 11S.
  40. el alcalde Giuliani afirmó que había sido advertido que la torre sur se iba a venir abajo.
  41. las torres fueron diseñadas para aguantar todo tipo de adversidades, que iban desde vientos huracanados hasta múltiples impactos de aviones, y al contrario de lo que algún “experto” afirmó, éstas no tenían una estructura hueca sino que tenían 47 columnas metálicas inmensas.
  42. en 1975 la torre norte sufrió un incendio provocado por un pirómano que se extendió a 6 plantas y duró 3 horas y que por aquel entonces no estaban instalados todos los sistemas antiincendio que estaban operativos en el 2001.
  43. su estructura de acero, tanto interna como externa y sus ensamblajes, formaban una malla que hacía de ésta una estructura redundante, es decir, que si una parte de ésta quedaba dañada el resto absorbía la sobrecarga producida.
  44. millones de dólares en lingotes de oro y plata desaparecieron de los sótanos del WTC4 y que solamente unos millones fueron recuperados.
  45. las torres contenían asbestos que por ley debían ser eliminados y que su coste habría supuesto muchos millones de dólares.
  46. cuando se desplomaron, la inmensa mayoría de su material quedó reducido a mínimas partículas, y el plomo de los ordenadores, el americio (radiactivo) de los detectores de humo, los asbestos (cancerígenos) y todo tipo de materiales se transformaron en polvo tóxico.
  47. este polvo ha matado a varios perros de rescate, que ha dejado enfermedades crónicas a cientos de ciudadanos y la imposibilidad de trabajar para el resto de su vida a otros tantos.
  48. las autoridades emitieron un comunicado y permitieron que la gente saliera a la calle y respirara el aire tóxico y que también pidieron a los bomberos y grupos de rescate que no utilizaran mascarillas para no alarmar a la gente.
  49. el aire meses después era aún tóxico en la zona cero.
  50. minúsculos fragmentos óseos fueron encontrados en la azotea de edificios colindantes a las torres.
  51. en el World Trade Center se encontraron restos de acero fundido semanas después de los ataques.
  52. más de 100 días después y a pesar de que se había vertido gran cantidad de agua sobre los escombros el fuego persistía y que hay fotos de la NASA que revelan altas temperaturas.
  53. no hubo objetos identificables como por ej.material de oficina, cristal o madera en los alrededores.
  54. los principales materiales identificables fueron trozos de acero, aluminio, papel y polvo.
  55. cerca de 20.000 trocitos de cuerpos humanos fueron encontrados en la zona cero.
  56. no se conocen colapsos o derribos de edificios en los que los restos humanos hayan quedado sin poder ser reconocidos.
  57. el queroseno podría debilitar el acero, pero no fundirlo puesto que el primero no arde a una temperatura suficiente (unos 800ºC).
  58. mucha gente, incluídos bomberos afirmaron haber oído explosiones previamente al desplome de los edificios y que sus testimonios fueron grabados.
  59. los edificios que no son demolidos no caen de forma vertical y que no caen en caída libre.
  60. nunca en la historia un sólo edificio de estructura metálica se habia derrumbado por causa del fuego y que el 11 de septiembre fueron nada más y nada menos que tres.
  61. hay una asociación de pilotos que exige que se reabra la investigación.
  62. hay otra asociación que incluye a arquitectos e ingenieros civiles que también exigen la reapertura de la investigación.
  63. el gobierno no incluyó el WTC7 en su primer informe sobre los ataques.
  64. el WTC7 se desplomó en caída libre sin ser impactado por ningún avión y que lo hizo en aprox. 6 segundos.
  65. una corresponsal de la BBC informaba de que el WTC7 se había derrumbado cuando todavía lo tenía en pie detrás al fondo como se aprecia en las imágenes.
  66. el experto alemán en demoliciones Danny Jowenko afirmó (cuando no sabía que el edificio del video que le mostraron era el WTC7 y que se vino abajo el 11S) que sin duda era una demolición llevada a cabo por un grupo de expertos.
  67. miles de documentos sobre escándalos financieros, como los del caso ENRON se perdieron para siempre en los 6 segundos que se desplomó el WTC7.
  68. Larry Silverstein reconoció en una entrevista que dió la orden de derribar el WTC7.
  69. el NIST ha tardado 7 años en explicar las causas del desplome del WTC7 y lo achaca a "un nuevo fenómeno" llamado "expansión térmica".
  70. la mayor eliminación de pruebas de la historia se produjo días después de los ataques al deshacerse el gobierno de todo el acero al enviarlo a China.
  71. se han encontrado sustancias que confirman el uso de un producto químico incendiario que funde el acero en el WTC.
  72. maniobras militares en las que participaba la fuerza aérea se llevaron a cabo el 11 de septiembre.
  73. la inteligencia rusa detectó importantes movimientos militares llevados a cabo por las fuerza americanas tiempo antes de los ataques.
  74. las famosas llamadas desde teléfonos móviles desde el vuelo 93 no eran posibles en el 2001 puesto que la tecnología para hacerlo no estaba suficientemente desarrollada en aquella época.
  75. Larry Silvertein se embolsó un pico debido a los ataques.
  76. los principales medios de comunicación tratan a los discrepantes de la versión oficial "teóricos de la conspiración".
  77. los principales medios de comunicación no se han cuestionado en ningún momento la credibilidad de la información dada por el gobierno.
  78. políticos extranjeros no dudan que el 11S fue algo planeado desde dentro del gobierno.
  79. el ex-gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, afirma que si algo así hubiera pasado cuando él era gobernador la investigación se habría iniciado en breve.
  80. CIENTOS DE MILES DE PERSONAS DE TODOS LOS CAMPOS EN LOS EE.UU. Y EN EL MUNDO LLEVAN AÑOS DE LUCHA TRATANDO DE QUE SE REABRA LA INVESTIGACIÓN DE LO ACONTECIDO EL 11S.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Todos los caminos llevan a Dick Cheney

La mayoría de las personas saben que el Vice Presidente Dick Cheney es el ex CEO (Jefe Ejecutivo de Organización, que es el más alto cargo de una empresa anglosajona) de la Halliburton, compañía que gana miles de millones de dólares al año con los contratos relacionados con el petróleo y principalmente de defensa relacionados con la construcción (y que la guerra y el caos aumentaron los beneficios de la Halliburton, que a su vez aumentaron el valor de las acciones de Cheney). La mayoría de las personas también saben que Cheney fue secretario de Defensa bajo George H.W. Bush. Muchas personas saben que Cheney fue un congresista de Wyoming. Algunos incluso saben que él fue uno de los fundadores del Proyecto para un Nuevo Siglo Americano. Wikipedia La gente que lee mucho sabe que el Proyecto para un Nuevo Siglo Americano (PNAC), a su vez, pidió un nuevo imperio americano mucho antes del 11S, y lamentó que, sin un "catastrófico y catalizador evento, como un nuevo Pearl Harbor", la transformación de América en un imperio sería muy lenta. Pero incluso la gente bien informada lo que probablemente no sabe es que “en la década de los 70 Cheney fue fundamental en la generación de falsos datos de inteligencia al exagerar la amenaza soviética con el fin de socavar la convivencia entre los EE.UU. y la URSS, que justificaron cómodamente enormes cantidades de dinero para el gasto en tiempos de guerra fría. Ver también este artículo. Esta artimaña presagiaba lo que iba a ser el papel de Cheney en la generación de falsos datos que más adelante proporcionaría la inteligencia americana sobre Irak durante 30 años. ¿Sabías que Cheney ha sido tal vez el principal impulsor para el fortalecimiento de los poderes de la Casa Blanca hasta “un punto monárquico”, por lo menos 20 años? ¿Habías oído que Cheney ha sido el principal defensor de la creación y la continua aplicación de medidas en los últimos 20 años. Qué estas medidas, que se implementaron el 11S podrían conducir a la destrucción de la Constitución, la virtual disolución del Congreso, y la pérdida de la forma de gobierno de América? ver artículo ¿O que documentos recién desclasificados muestran que Cheney estuvo involucrado en disputas sobre escuchas telefónicas ilegales hace 30 años? ver artículo ¿Te has enterado de que el ex director de la CIA acusó a Cheney de supervisar la aplicación de la tortura? ver artículo ¿O que el ex jefe de personal de Colin Powell dijo que Dick Cheney es culpable de crímenes de guerra por su papel en la facilitación de la tortura? ver artículo Y que, de acuerdo con el periodista ganador del premio Pulitzer que descubrió el escándalo de la tortura en la prisión de Irak y la matanza contra civiles vietnamitas, Cheney es el principal tipo que ayuda a financiar a los grupos que el gobierno de EE.UU. afirma son terroristas ver artículo (véase confirmación del artículo aquí y aquí). Y supongo que es el principal arquitecto de los esfuerzos para bombardear Irán. ¡Sí, señor Cheney! (véase también este artículo). Para recapitular, el pasado de Cheney incluye: • Petróleo • Defensa • Falsificación de inteligencia y el uso de tácticas de miedo acerca de los enemigos para justificar una agenda pre-militar planeada • Presión para dar al presidente los poderes del rey • Demandar un imperio americano y lamentar la falta de un "nuevo Pearl Harbor" • Estado policial tipo “escuchas telefónicas” • Vender la guerra • Promoción de la tortura • La financiación de Al-Qaeda ¿Convergen todos estos aspectos del señor Cheney en la debacle de Irak? Bueno, un alto funcionario en el Departamento de Estado dijo que la participación de Cheney era un secreto "Cabal", y que Cheney y un puñado han secuestrado la política exterior del país. ¿Convergen estos puntos sobre Cheney el 11S? Esta última cuestión no es meramente académica: El Vice Presidente Cheney estaba al parecer a cargo de las 5 operaciones de maniobras militares que se llevaban a cabo el 11S y coordinaba la "respuesta" del gobierno a los ataques. Véase este artículo CNN, y este artículo. Y que Cheney monitorizó el vuelo 77 durante muchas millas cuando se aproximaba al Pentágono y que cuando un militar le preguntó "¿siguen las ordenes en pie? Cheney respondió afirmativamente”. "El avión está a 50 millas. El avión está a 30 millas". Y que cuando llegó a "el avión está a 10 millas", el joven también dijo al Vice Presidente, "¿siguen las órdenes en pie?" Y el Vice Presidente y se giró bruscamente y dijo: "Por supuesto que las órdenes siguen en pie. ¿Has oído lo contrario?" Ver el video tú mismo (y ver este artículo). Los motivos de Cheney en relación con el 11S eran fuertes. Como dijo un conocido escritor: "Durante toda su carrera, ha buscado el poder ilimitado. La presidencia de Bush y el 11S finalmente le dieron..." Posdata: En aras de la brevedad, no he incluido numerosos actos cometidos por Cheney. Por ejemplo, puedes haber oído que la Energy Task Force (Órgano de Tareas de Energía) presidido por Cheney antes del 11S recogió mapas de los campos de petróleo iraquí y los posibles pretendientes para dicho petróleo. Pero ¿sabías que un documento secreto escrito por el Consejo de Seguridad Nacional el 3 de febrero de 2001 dirigió al personal del NSC (National Security Council, al cual pertenece la CIA) a que cooperaran plenamente con el Grupo de Tareas de Energía, ya que consideraba la "fusión" de dos ámbitos aparentemente no relacionados de la política: "la revisión de las políticas operativas hacia los estados renegados", como Irak, y "las acciones relativas a la captura de nuevas existencias de petróleo y campos de gas "? En otras palabras, es difícil dejar la inspección de los mapas de petróleo irakí por parte de la Energy Task Force de Cheney como una inofensiva comparación con la política energética de América con conocidas reservas de petróleo debido a que el NSC explícitamente vinculó a la Energy Task Force, el petróleo y el cambio de régimen. De hecho, un ex alto cargo en el NSC para asuntos rusos, ucranios y asiáticos dijo que "si este pequeño grupo está planteando planes geoestratégicos a cuenta del petróleo, pone la cuestión de la guerra en el contexto de los capitanes de la industria del petróleo que se sientan junto a Cheney y por la que se establecen grandes planes globales" (véase este artículo). Cheney fue en gran parte responsable de generar falsos datos de inteligencia sobre Irak para justificar la guerra. Cheney fue probablemente responsable de la expulsión de la agente de la CIA, Valerie Plame. Que, de acuerdo con el ex secretario de Defensa británico, Cheney “cortó el bacalao” para iniciar la guerra de Irak.Por supuesto, Cheney no ha actuado solo en sus acciones. Pero él ha sido un jugador importante en muchos ámbitos diferentes y es, quizás, la figura más conocida que ha tenido una mano en todos los mencionados acontecimientos. Cheney podría no ser el Gran Señor Final en estos crímenes, pues parece que ha conseguido tener las manos más sucias y estar más cerca de la verdadera sede del poder, más incluso que Bush. Además, Cheney no fue el único responsable de las antes mencionadas acciones, ya que contrató a muchas de las personas que causaron el daño, como el principal arquitecto de la guerra de Irak ”Paul Wolfowitz”.

El artículo es casi en su totalidad, salvo algunos links propios y otros omitidos, una traducción del artículo del blog de George Washington "All roads lead to Dick cheney"

Las 935 mentiras de la administración Bush sobre Irak

El presidente de los EE.UU., George W Bush y otros altos funcionarios realizaron casi mil declaraciones falsas sobre la amenaza para la seguridad nacional que suponía Irak tras los ataques del 11 de septiembre, según un estudio realizado por dos organizaciones sin ánimo de lucro. Associated Press reporta el estudio, publicado en la web del Centro para la Integridad Pública, en el que llegó a la conclusión de que las declaraciones "fueron parte de una campaña orquestada que envolvió a la opinión pública y, en el proceso, llevó a la nación a la guerra decididamente bajo falsos pretextos". Según el estudio, 935 declaraciones falsas fueron emitidas por la Casa Blanca en los dos años posteriores a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 .En los discursos, sesiones informativas y entrevistas, el Presidente Bush y otros funcionarios declararon "inequívocamente" por lo menos en 532 ocasiones que Irak tenía vínculos con al-Qaeda, o había armas de destrucción masiva o estaba tratando de obtenerlas. "Ahora es indiscutible que Irak no posee armas de destrucción masiva o vínculos significativos con Al-Qaeda", escribieron los autores del estudio Charles Lewis y Mark Reading-Smith. "En resumen, la administración Bush llevó la nación a la guerra basándose en información errónea que propagó metódicamente y que culminó en la acción militar contra Irak el 19 de marzo de 2003." El estudio reveló que solo el Presidente Bush hizo 259 declaraciones falsas - 231 sobre las armas de destrucción masiva y 28 acerca de los vínculos de Irak con Al-Qaeda. Los otros funcionarios nombrados en el estudio son el Vicepresidente Dick Cheney, la entonces Consejera para la Seguridad Nacional Condoleezza Rice, el entonces Secretario de Defensa Donald Rumsfeld, el entonces Secretario de Estado Colin Powell, el Secretario Adjunto de Defensa Paul Wolfowitz y los portavoces de la Casa Blanca Ari Fleischer y Scott McClellan . "El efecto acumulativo de estas falsas declaraciones - amplificado por miles de noticias y emisiones - fue masiva, con la cobertura de los medios de comunicación creando un estruendo casi impenetrable durante varios meses críticos en el período previo a la guerra", concluye el estudio. "Algunos periodistas - de hecho, incluso algunas organizaciones de noticias - han reconocido que su cobertura durante los meses anteriores a la guerra fue demasiado deferente y acrítica. No obstante, gran parte de su omnipresente cobertura dió ratificación 'independiente' adicional a las falsas declaraciones sobre Irak de la administración Bush."

sábado, 22 de septiembre de 2007

La gran mentira - La demolición del WTC y de la constitución de los EE.UU

11 de septiembre del 2001
Si hay algo que la mayoría de europeos no sabíamos es que el mismo día y en el mismo sitio, otro rascacielos se desplomaba sin haber sido impactado por un avión.
El WTC 7 - Edificio Nº 7 era un edificio de 47 plantas y estructura metálica que se desplomó verticalmente 7 horas después del colapso de las torres gemelas. Unos pequeños fuegos dispersos aparecieron en varias plantas separadas y columnas de acero volaron desde una de las torres para incrustarse en su fachada, de cualquier modo, este edificio reforzado en el que la CIA , FBI y el organismo dedicado a investigar los escándalos financieros de Wall Street, Securities and Exchange Commission(SEC) no sufrió daño tal que pudiera causar su colapso. Arquitectos & Ingenieros por la verdad del 11S /Architects & Engineers for 9/11 Truth afirman que fue una demolición controlada. Danny Jowenko , experto alemán en demoliciones, no duda de que esto es un trabajo de demolición llevado a cabo por un grupo de expertos.